HISTORIA Y CULTIVO DE LA MALVASÍA EN LA VILLA DE SITGES (III)

ILa villa principal de la isla que hace las veces de capital es Napoli de Malvasía llamada también Monembasia y Nápoles de Malvasía, algunos creen que esta villa, no es otra qué la antigua ciudad que se hallaba situada hacia el Norte á dos horas de esta, llamada Epidauras Lámera, villa hermosa que da nombre a la isla y está situada sobre el cono de un peñasco el cual se levanta del mar hacia el Norte de Cap Malea. Está coronada por una inconquistable fortaleza, y rodeada de verdes y frondosos laureles y algarrobos, desarrollándose en su bella campiña, lozana y fresca, la rica vid Malvasía.

La historia de la heroica Monembasia, no deja de tener importancia y por lo mismo transcribieron algunas curiosas noticias sobre la misma.

Monembasia fue construida por los griegos, los cuales se acogieron á dicha ciudad cuando les acometieron los eslavos; guardaron siempre fidelidad a los emperadores bizantinos y en 1147 de defen¬dieron valientemente de Roger de Sicília. Esta ciudad fortificada dio mucho que hacer a los caballeros de la Champagne. Godofredo de Villeherdonin había conquistado toda la Morea, pero no pudo conquistar Monembasia y Nanplia. Su hijo Godofredo lI, le siguió por el año de 1214; también él murió y tan solo a su hermano y sucesor Guillermo I, le fue reservado el concluir dicha conquista, pero para ello tuvo necesidad de fuerzas extranjeras. Cerró un tratado con Venecia, según el cual, la cedia Modon y Koron, pero que para su ayuda le debía enviar cuatro galeras. Para el sitio de la ciudad llamó a todos los velachos de la Morea y los envió al Duque de Naxos, al conde de Cephalonia, al gran Señor de Atenas y a los tres señores de Euripas (de la isla de Negroponto), Todos se juntaron en la llanura de Niokli y luego que hubieron llegado ante Monembasia, hicieron obrar sus catapultas, las cuales derribaron muchas casas y mataron a muchos de sus habitantes. El cerco duró tres años; hasta que hubieron comido el último gato: entonces fue cuando se rindió esta fiel y valiente ciudad. Los habitantes de estas islas de peñas, según informes auténticos, eran en aquel entonces muy valientes y guerreros; eran poderosos por mar y tierra, muy ricos y de buenas costumbres, y ya desde muy antiguo, célebres por su fiel adhesión a los intereses na¬cionales griegos.

(…)

La rica vid Malvasía se desarrollaba, según hemos manifestado, en el valle de la heroica ciudad siendo muy apreciadla y cultivada con esmero, por los habitantes de aquellas islas, y su rico licor trasportado a lejanas tierras; y fue conocido y celebrado especialmente entre los venecianos que la compraban a precios fabulosos, según nos dice la historia.

Sin duda, la riqueza del vino y la ambición do obtenerlo fue causa de que los sarmientos de tan rica planta fueran trasportadas directa¬mente a las islas de Madera y a las Canarias, en las que se desarrollaron como en su país natal y así fue extendiéndose el cultivo tan celebrada planta.

Ahora, en Monembasia, dice una reseña histórica fechada en 1842 no crece ni una cepa de Malvasía y aun se han de dejar de enviar las uvas de las islas Andros y Santoris en donde se desarrollaba con lozanía por falta de cultivo de tan rica planta, después de haber sido destruida por una maléfica enfermedad que sin duda seria el Oidium, a pesar de que nada especifica la crónica.

Por noticias que hace poco me ha remitido directamente de Grecia el sábio Dr. Landerer sobre el cultivo é historia de la Malvasía en las bellas campiñas de Grecia, se deduce que aun existen en aquellas hermosas tierras algunas viñas de Malvasía extendidas en algunas provincias y principalmente en las islas del archipiélago de Tinos, de Zea, de Andros, Santosis, Mykone, aunque en estos dos últimos casi ha desaparecido tan rica planta. Su vino aun es apreciado y exportado a Turquía y Alemania aunque en poca escala por la competencia que le hacen otros vinos, lo que hace que se tenga poca afición a su cultivo.

Dice también el Dr. Landerer que cuando Grizza y Nicolao Paleó¬logos vendieron Monembasia con Navarin a los venecianos, estos fueron muy prudentes en no mezclarse en las cuestiones religiosas de los griegos, procurando solo alargarles y hasta empuñaron las armas para defenderles contra los ataques de los turcos. Al posesionarse la república de S. Marcos de aquella ciudad fue su primer objeto explotar aquel rico suelo para mandar a la república los ricos productos del país conquistado, especialmente la Malvasía que los venecianos la apreciaban con delirio, trasportándola a lejanas tierras, de modo que la bahía de Monembasia estaba muy frecuentada por bajeles de apar¬tadas naciones encargadas del trasporte de tan rico licor.